PASO DE GIGANTE DEL VALENCIA

Valencia 3-0 Rangers  

1-0 Soldado (32')

2-0 Soldado (69')

3-0 Tino Costa (88')

 

El Valencia mostró su mejor versión ante el Glasgow Rangers para pasar por encima de los escoceses y superarles con un claro tres a cero. Con dos delanteros y tres jugones en la medular, los hombres de Emery no dieron opción a su rival y vuelven a depender de sí mismos para estar en la próxima ronda de la máxima competición continental.

El guión del partido parecía claro desde antes del pitido inicial y, efectivamente, no se movió un ápice de lo previsto. Un Rangers de nuevo con cinco atrás y tan sólo Miller en punta aguantaba metido en su campo, dispuesto a aguantar el acoso del Valencia y buscar el peligro a la contra. Los de Unai, esta vez con Soldado y Aduriz arriba, también empezó a cumplir desde el inicio con su parte. A los cinco minutos, ya había gozado de sus dos primeras ocasiones de gol en sendos disparos de Mata y Ever. Eso sí, la más clara en los primeros minutos fue para un Rangers que, en su primer contragolpe, llevado por la izquierda, estampó el balón en el poste izquierdo de César, en un duro disparo de Naismith. La respuesta del Valencia, en un trepidante comienzo, fue igual de clara. Aduriz cedió atrás que Mata, a bocajarro, se encontrara con la parada milagrosa del veterano McGregor.

 

El dominio valencianista era absoluto y, antes del ecuador del primer acto, Aduriz añadió un cabezazo que rozó al poste al listado de ocasiones claras para el Valencia. Con un muy centrado Ever y con Mata activo por su banda, era, sin embargo, por la parte derecha por donde mejor penetraban los blanquinegros, a los que sólo les faltaba abrir el campo con mayor velocidad. Por fases, el Rangers conseguía imponer el ritmo lento que le convenía pero, al fin, el que lo había buscado encontró su premio. Tuvo que ser a balón parado, en un zurdazo de Soldado, hábil y oportunista, al aprovechar un balón muerto a la salida de un córner.

 

Tras la reanudación, el Valencia mantuvo el mismo dominio de la primera, frente a un rival que forzosamente alteró su planteamiento ultradefensivo. Además, los de Emery se mostraban algo más pausados en ataque. Aduriz, en un soberbio cabezazo, estuvo a punto de anotar el 2-0 que habría sentenciado el duelo. Fue sólo el aviso. A veinte para el final, una brillante contra iniciada por Soldado en banda diestra fue finalizada por el él mismo de modo impecable. Segundo gol del valenciano y explosión de alegría en Mestalla, que continuó en los minutos finales con la ovación en la salida del césped de los destacados Soldado y Joaquín.

 

Tino Costa, que había ingresado en el terreno de juego por Éver Banega en el 69, se unió al festival anotador y redondeo esta noche mágica de Champions con el tercero. Su segundo gol como valencianista y también en la máxima competición europea, después del golazo inolvidable en el campo del Bursaspor.